Están los bebés… y luego está Marco. Después de más de un año en esta preciosa profesión, vino a verme el bebé que estuvo dormido toooda la sesión y no tuvimos imprevistos de ningun tipo jeje. Y así se refleja en sus fotos.
Trabajar con recién nacidos es muy dificil, por la delicadeza que requiere, paciencia y mucha pasión. Cada bebé es de una manera, no todos admiten las mismas poses… además que podemos hacer las fotos un día que justo el peque tiene principio de cólicos o simplemente no se duerme…
Pues Marco vino un día brillante jeje…parecía que había venido a echar la siesta jeje…que agustito estaba… Y lo tenemos en fotos de malote con cresta (petición del papi) y de bueno repeinadito jeje.
Un millón de gracias al asistente de la sesión, Valentín, su papi, que no dejo de ayudarme en cada foto. A la mami, por supuesto, por tan previsora y por dejarme disfrutar del bombonazo.
Espero que os gusten tanto como a mí 🙂